Hoy les escribo para decirles hasta prontito, porque si todo resulta bien, en febrero nos podremos reencontrar y ojalá sea, abrazo mediante.
Aquellos que me conocen, saben sobre mi insistencia sobre la importancia del valor de la palabra, su circulación, su escucha, el diálogo, el consenso, los acuerdos, los debates. La comunicación nos permite vivir en sociedades más justas y nos permite crecer con el otro. Y vaya si este año nos hemos comunicado y hemos crecido!!!!
Al momento de poner en la balanza, lo transitado, no siempre pesa lo más gratificante, sé del dolor por el cual se pasó en esta pandemia, pero también estoy convencida que lo más sano que podemos hacer en momentos difíciles, es aferrarnos a los detalles que nos marcaron
Una lucecita en el camino, a aquellas cosas que nos abrazaron en los peores tramos del camino. Y así seguir construyendo y andando.
Por eso durante estas últimas semanas, me dediqué a escuchar y a registrar sentires de cada una/ o de ustedes, en reuniones de padres, madres, docentes, en zoom de peques que sin duda dan cuenta de lo que nos tocó vivir este 2020.
Les regalo un poquito de todo lo que me llevo de estas escuchas y agradezco haber tenido el privilegio de atesorarlas…
Qué las disfruten!!!!!
• De la tragedia se aprende.
• Sentí al principio dolor mental y de alma, me desesperé. Luego me fui calmando.
• Se rompieron las paredes entre mi casa y la escuela
• Disfruté de la tarea conjunta
• Aprendí a escuchar a mi hijo.
• Al principio me desesperó lo incierto.
• Me sentí “ la señorita miel”, nunca un enojo….
• Ahora entiendo de lo que se trata enseñar.
• Admiro lo que hicieron y lo que hacen, no tenía idea.
• Nunca hice tanta tarea…..
• La demanda al comenzar, me hizo sentir que no iba a poder dar tanta respuesta, fue angustiante.
• Atravesamos el covid, y nunca me sentí lejos de la escuela.
• Descubrí la necesidad del arte para hacer tolerable la existencia.
• Me divertí mucho con algunos zoom.
• Se me mezclaron los tiempos casa-cole
• En pandemia, fueron mi familia. Hicimos un poco el ridículo, pero lo disfrutamos!!!
• Fue como tener clases abiertas todo el año
• Trabajé con todos/as
• Sentí libertad y confianza en todo momento hacia mi tarea
• Trabajé con público
• Hasta algunos vecinos me enseñaron computación
• Perdimos la espontaneidad del aula , pero se generó algo mágico, diferente.
• Muchas veces sentí que remé…
• Me la pasé trabajando hábitos… agotador.
• Yo en zoom y mi perra detrás haciendo pis, un papelón.
• Existió trabajo de trastienda, mucho que no se vio.
• Se puso a prueba tanto mi autoexigencia, como mi capacidad de paciencia.
Estas son, mezcladitas las palabras de los que conformamos la 16. Me pareció importante no aclarar de quién venían, porque más allá de su procedencia, desde cualquier rol, todos sentimos algo de cada una de estas expresiones.
Y para cerrar , elegí dos frases que sí, me permito dar el nombre de quienes las dijeron. No solo porque son maravillosas y merecen el mayor de mi reconocimiento, sino porque son,tal vez, las que mejor sintetizan el año:
“La tarea no es la escuela” Simón (2do. Grado)
“Conocí tanta vida interior” Claudia (Profe de Música)
Y así en este año en donde las vidas se nos cruzaron atravesando todo tipo de límites, nos despedimos felices de saber que nuestra bellísima claudia, se jubila llenita de cada uno de nosotros.
Llenitos todos/as de saber que hemos compartido la tarea con grandeza, en todo momento.
Profundamente los abrazo y a través del mismo, les hago llegar el cariño inmenso y el agradecimiento de todo el equipo de la Escuela 16.
Marce dire